lunes, 3 de agosto de 2015

AGOSTO 3, 2015

GUILLERMO MONROY, ALEJANDRA GONZÁLEZ, CECILIA MARTINEZ, IVANOVA AUBRYU, AMIRA ESCUTIA, ANABELLA BORTONINI, VIANEY ACOSTA Y A FRANCISCO PRECIADO. ALGO PARA REFLEXIONAR Una joven China llamada Li se casó y fue a vivir con el marido y la suegra; pero Li y su suegra no se entendían. Los meses pasaron. Ellas discutían y peleaban cada vez más. De acuerdo con una antigua tradición china, la nuera tiene que cuidar a la suegra y obedecerla puesto que por su edad es mujer sabia. Li, no soportando más vivir con la suegra, tomó la decisión de visitar a un amigo de su padre, quien después de oírla tomó un paquete de hierbas y le dijo: No deberás usarlas de una sola vez para liberarte de tu suegra, porque eso causaría sospechas. Debes darle las hierbas varias veces y así irán lentamente envenenándola. Nadie sospechará de ti. Pero muy importante, NO discutas ni pelees con ella, ayúdala a resolver sus problemas. Li respondió: "Si, señor Huang, haré todo lo que me pide". Pasaron las semanas y Li servía una comida especialmente preparada para su suegra, controló su temperamento, obedecía a la suegra y la trataba como si fuese su propia madre. Después de seis meses, Li había controlado su temperamento con la suegra y no había tenido ni una discusión con ella, que ahora parecía mucho más amable y más fácil de lidiar. Las actitudes de la suegra también cambiaron y ambas pasaron a tratarse como madre e hija. Un día Li fue nuevamente con el Sr. Huang, para pedirle ayuda y le dijo: "Por favor ayúdeme a evitar que el veneno mate a mi suegra. Ella se ha transformado en una mujer agradable y la amo como si fuese mi madre. No quiero que ella muera por causa del veneno que le di". El Sr. Huang sonrió y señaló con la cabeza: "Sra. Li, no tiene por qué preocuparse. Su suegra no ha cambiado, la que cambió fue usted. Las hierbas que le di eran vitaminas para mejorar su salud. El veneno estaba en su mente, en su actitud, pero fue echado fuera y sustituido por el amor que pasó a darle a ella". En China existe un adagio que dice: "La persona que ama a los otros, también será amada". La mayor parte de las veces recibimos de las otras personas lo mismo que les damos. Y usted… ¿por cuantas personas es amado???

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